La pista de baile
Es nuestro espacio. Un entorno especial creado bajo condiciones muy controladas. La pista de baile es nuestro espacio sagrado donde podemos expresarnos con libertad, recargar energías y sentirnos seguros. Un entorno mágico donde cada detalle tiene su intención, donde los 4 elementos de la naturaleza (aire, tierra, fuego y agua) están representados. Es nuestro santuario y lo cuidamos como tal.
Limpieza energética. Un entorno especial creado bajo condiciones muy controladas. Delimitamos su área, la limpiamos energéticamente, la purificamos y la consagramos. Definimos los límites de la energía que contendrá. La limpieza previa comprende retirar las energías no deseadas, dejando el espacio inmaculado para poder movernos en él.
El ritual. Antes del inicio de la actividad realizamos su inauguración en un acto sencillo por el que se declara que la pista de baile está limpia y preparada para la actividad. Esta es una manera práctica de demostrar la creencia en que la naturaleza es sagrada. La pista de baile es nuestro espacio sagrado donde podemos expresarnos con libertad, recargar energías y sentirnos seguros.
Aromaterapia. Utilizamos inciensos y resinas que nos hechizan a los amantes de las fragancias con sus aromas envolventes. Recetas especiales para purificar y aromatizar el espacio. Rodeados de un agradable aroma nos aporta bienestar sensorial, psicológico, emocional, espiritual y energético. El humo aromático y el propio aroma permiten este contacto mágico entre la materia, lo cotidiano y el mundo espiritual, influyendo en nuestra salud sensorial y psicológica.
El incienso desprende propiedades aromáticas saludables haciendo que el cuerpo, dulcemente acariciado por el flujo aromático, conecte con un estado de ánimo adecuado para la actividad. Los problemas y las tensiones cotidianas se disuelven y nuestros nudos internos se van soltando.
Escenografia. Creamos una escenografía mágica que estimule los sentidos y abra los canales espirituales. No escatimamos recursos en la decoración, en la ambientación o en la iluminación. El espacio es un altar de celebración. Predisponemos favorablemente nuestra sensibilidad y nos abrimos a disfrutar de un ambiente extraordinario.
Cromoterapia. Buscamos la iluminación adecuada para promover un bienestar físico y emocional apropiado en cada fase de la sesión. Utilizamos la influencia de los colores en nuestras emociones y estado de ánimo. Cada color tiene una vibración única que puede afectar nuestro cuerpo y mente de diversas maneras. A través de las luces de colores creamos un ambiente mágico que promueve nuestro bienestar. Utilizamos la iluminación para regular los ritmos de la sesión. Cada color tiene una longitud de onda y una frecuencia específica que influye en la energía del cuerpo y la mente. Al exponernos a ciertos colores, equilibramos y restauramos la energía de nuestros chakras o centros de energía.
