1. Estoy en casa
Vivo Ecstatic Dance como una experiencia transformadora, la cual me permite avanzar en el apasionante camino del autoconocimiento.
Bailo mi danza interior mientras las creencias, los prejuicios y los condicionamientos se desvanecen, dejándome vacío, con una conciencia pura, libre de pensamientos. Me conecto directamente con la realidad tal como es. Aprendo a centrar mi atención en el aquí y ahora, y entonces ocurre la meditación. El milagro sucede cuando estoy abierto y disponible a ello. Lo doy todo en el baile, simplemente soy yo mismo, me entrego al momento y la experiencia me cambia. Cuando bailo de manera libre y espontánea, mis formas y limitaciones cotidianas desaparecen y me convierto en una puerta abierta al universo donde las energías interactúan. Soy parte del todo. llego a un estado donde mi mente se apaga y soy capaz de afrontar la realidad sin distorsión alguna. Cuando bailo soy. Observo y comprendo. Todo está perfecto. Estoy en casa.